El Bolsón es una ciudad que resulta muy atractiva. Se encuentra en medio de montañas, bosques, ríos y lagos, al pie
del cerro Piltriquitrón, que en idioma tehuelche significa “colgado de las
nubes”. Pero lo que la hace diferente no es este singular entorno natural en
el que se encuentra sino sus habitantes.
Amantes de la vida en
contacto con la naturaleza y con la idea de producir la mayor parte de los
alimentos que consumen. El turismo y la producción rural son la base de la
economía local. Se destaca la plantación de lúpulo, frutillas, conservas al
natural, plantas aromáticas y medicinales, hortalizas de producción orgánica y
alta calidad. La comercialización de todos sus productos así como de la
artesanía de todo tipo se da en la famosa Feria regional de El Bolsón, todos
los martes, jueves, sábados y domingos. Muy recomendable de visitar, probar la
cerveza artesana y una comida casera rica y económica.
En El Bolsón se desarrolló un movimiento cultural en
los últimos 30 años que tiene como base sobre todo la ecología, una actitud
respetuosa y de integración con la naturaleza y los métodos naturistas para una
mejor calidad de vida. Vivir en armonía con el medio ambiente, con un sistema
rural productivo, artesanal, orgánico, ecológico y auto suficiente.
Se trata además de un lugar en el que se han juntado
una gran cantidad de músicos, escritores y artistas en general.
Hubo un tiempo en el que gran parte del movimiento
hippy de diferentes partes del mundo se vino a esta localidad. Algunos de ellos
continúan aquí después de 30 años.
Aquí estuvimos con Luisa, una chica encantadora con
la que vivimos unos días. Ella nos recomendó lugares, caminatas y nos enseñó, junto a Juan, a
hacer las típicas empanadillas argentinas y sus curiosos pliegues. Nos abrió las puertas
de su casa desde el primer día y para nosotros fue la oportunidad de hacer un
alto en el camino en este rinconcito del planeta, después de casi dos meses de
viaje intenso.
Como no puede ser de otra manera hicimos el trekking
hasta el Piltri. Se trata de una ruta de dos días en la cual pasas por el bosque tallado, un lugar lleno de esculturas de madera talladas por diferentes artistas. Puedes quedarte a dormir
en el refugio, allí te vas a encontrar con gente muy buena onda, como Oscar un vasco - asturiano y viajero incansable, que esta trabajando en el refugio esta temporada.
Al día
siguiente caminamos hasta la cima donde puedes observar una vista de 365 grados de esta parte de la cordillera andina. Mires donde mires
te encuentras rodeada de estos gigantes con las cumbres ya nevadas. Todo un
espectáculo.
En Bariloche nos alojamos con Mario, un ingeniero con aficiones a la física con el que compartimos charlas sobre el enigmático universo. Un tipo realmente interesante con el que aprendimos unas cuantas curiosidades sobre agujeros negros y la teoría de la relatividad, fue un placer compartir las partículas de tu casa!
Bariloche es una ciudad al pie de un enorme lago que está totalmente orientada al turismo, con muchos comercios, bares, restaurantes, alojamientos en cabañas al estilo rústico con todas las comodidades, todo muy preparado para un turismo sobre todo en deportes de invierno y con un nivel económico bastante alto. No te puedes ir de este lugar sin probar su famoso chocolate.
Las montañas que lo rodean merecen una especial
atención. Para los amantes de la naturaleza; todas las poblaciones de la cordillera
andina ofrecen maravillosas posibilidades para hacer trekkings de diferentes niveles de dificultad.
Hicimos una caminata para conocer el parque municipal Llao Llao ubicado en el parque nacional Nahuel Huapi. Se trata de un bosque andino - patagónico muy bien conservado. Un lindo lugar donde puedes pasear entre bosques de arrayanes, (un árbol con el tronco de color anaranjado),
las playas de los lagos Perito Moreno y Nahuel Huapi, el cerro Llao Llao y Puerto Pañuelo. Se encuentra a unos 23 kms de Bariloche por lo que se puede llegar hasta la entrada del parque en un bus urbano. Una excursión para pasar el día realmente recomendable.
Hicimos una caminata para conocer el parque municipal Llao Llao ubicado en el parque nacional Nahuel Huapi. Se trata de un bosque andino - patagónico muy bien conservado. Un lindo lugar donde puedes pasear entre bosques de arrayanes, (un árbol con el tronco de color anaranjado),
las playas de los lagos Perito Moreno y Nahuel Huapi, el cerro Llao Llao y Puerto Pañuelo. Se encuentra a unos 23 kms de Bariloche por lo que se puede llegar hasta la entrada del parque en un bus urbano. Una excursión para pasar el día realmente recomendable.
Salir de Bariloche se convirtió en algo complicado.
Hacer dedo aquí lleva más tiempo del que pensamos y el no madrugar no ayudó
mucho en este caso…
Recorrimos menos de 100 kms y llegamos a la pequeña
población de Villa la Angostura.
Llena de cabañas de madera y árboles en todas
sus calles y por supuesto, las espléndidas montañas que acompañan y envuelven
todas estas localidades.
Seguimos camino hasta San Martín de los Andes
atravesando la ruta de los siete lagos por una de las carreteras más hermosas que
hemos visto. Este trayecto lo hicimos mientras caía la primera nevada del año.
En San Martín nos esperaba Ceci con una proposición indecente! Irnos a uno
de los famosos asados argentinos con su grupo de montañeros. Planazo! Todos ellos hacen cumbres y caminatas bastante duras pero no veas como reponen sus fuerzas!
En casa de Ceci estaba también alojado Dani, un
madrileño que vive en Santiago de Chile desde hace tres años y con el que compartimos aventuras de
viaje y unas cuantas risas.
San Martín está situado sobre la costa del lago Lácar.
Ofrece muchas y muy variadas opciones de
caminatas por sus diferentes rutas de montaña. En nuestro caso hicimos un trekking hasta el mirador Bandurrias, con este nombre no podíamos dejar de visitarlo! Este es uno de lo pocos territorios donde se encuentra una comunidad mapuche.
El pueblo mapuche, un grupo de habitantes indígenas del sur de Chile y del suroeste de Argentina, continúan luchando por su cultura y sus derechos así como la recuperación de las tierras que les fueron expropiadas.
El mirador cuenta con unas vistas geniales al lago que no se pueden dejar de disfrutar, dedicándole el tiempo necesario, sin prisas.
El mirador cuenta con unas vistas geniales al lago que no se pueden dejar de disfrutar, dedicándole el tiempo necesario, sin prisas.
Después de más de dos meses viviendo a
lo largo de la cordillera andina, disfrutando mucho de la naturaleza y de sus
gentes, nos empezó a apetecer algo más urbanita así que marcamos como siguiente objetivo
la ciudad de Buenos Aires, no sin antes hacer alguna que otra parada en el camino.
No hay comentarios:
Publicar un comentario